Los bautistas

“Sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo, de quien todo el cuerpo, bien concertado y unido entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro, recibe su crecimiento para ir edificándose en amor..”
Efesios 4:15-16

“Porque nosotros somos colaboradores de Dios…”
1 Corintios 3:9

La denominación bautista no se puede describir de una manera sencilla. No caben en categorías nítidas. Diversos de muchas maneras, los bautistas se definen, no por una sola doctrina, sino por un conjunto de creencias y prácticas. La suma de éstas hacen a los bautistas un compañerismo único de creyentes. Abundan los materiales que describen a los bautistas. Este artículo ofrece solamente un resumen breve.

¿Quiénes son los bautistas?

Los bautistas son una gente diversa.

Racialmente los bautistas son “rojos, amarillos, cafés, negros y blancos.” Hace tiempo predominaban los blancos, pero ahora los bautistas son virtualmente un caleidoscopio de tonalidades humanas.

Económicamente los bautistas varían desde pobres a billonarios. Viven en chozas y mansiones. Algunos subsisten por prestaciones sociales y otros prosperan como empresarios.

Políticamente los bautistas corren la gama entera. Sirven en numerosos puestos gubernamentales y también sufren la persecución de gobierno.

Educacionalmente los bautistas varían desde analfabetos hasta eruditos brillantes. Los bautistas incluyen a aquellos que no tienen educación formal y también a los que han ascendido al peldaño más alto de la escalera académica.

Religiosamente las congregaciones bautistas adoran de manera formal e informal. Se encuentran tanto en grupos llamados conservadores como liberales.

Culturalmente hay bastantes variaciones entre los bautistas. Hay diferencias de dieta, vestimenta y costumbres. Ni la moda de vestirse ni de peinado define al bautista. Los bautistas hablan numerosos idiomas y dialectos.

¿Dónde se encuentran los bautistas?

Los bautistas se encuentran por todo el mundo.

Los bautistas viven, adoran y ministran en más de cien países. La Alianza Mundial Bautista mantiene los datos más completos que existen, pero las estadísticas exactas sobre los bautistas son difíciles de determinar. Es estimado que aproximadamente 50 millones de creyentes bautizados son miembros de iglesias bautistas por todo el mundo. Millones más, quienes no son miembros, participan en iglesias bautistas y se benefician de ellas.

La mayor concentración de bautistas se encuentra en Norte América. En los Estados Unidos los bautistas constituyen la denominación no-católica más grande. Organizados en cientos de asociaciones de iglesias, convenciones, sociedades y federaciones, los bautistas se numeran entre 35 millones y 40 millones de creyentes bautizados.

La segunda concentración más grande de bautistas se encuentra en África donde aproximadamente residen 7 millones de bautistas. La población más grande de bautistas está en Nigeria con más de 2 millones, y luego sigue la República Democrática del Congo con casi 2 millones.

El tercer grupo más grande de bautistas vive en Asia, con más de 4.5 millones de miembros. La India tiene la población más grande de bautistas con aproximadamente 2 millones de miembros. Otros grupos numerosos se encuentran en Corea, Indonesia y las Filipinas.

La cuarta población bautista más grande se encuentra en Sudamérica con más de 1.5 millones de miembros. El número más grande reside en Brasil donde más de un millón de bautistas se congregan en casi ocho mil iglesias.

Los bautistas se hallan en poblaciones más pequeñas pero todavía significantes en las Islas del Caribe, Centro América, el Medio Oriente y Europa donde el número más grande de bautistas se encuentra en el Reino Unido y en las naciones de la antigua Unión Soviética.

La denominación bautista sigue creciendo mundialmente. La población de crecimiento más rápido está en África y la segunda está en Asia. El crecimiento más lento se da en Europa y Norte América donde la expansión bautista antes era el mayor.

¿Cuáles son las contribuciones de los bautistas?

Los bautistas no son del todo perfectos. Sin embargo han hecho y continúan haciendo muchas contribuciones valiosas. Casi todas las dimensiones de la humanidad se han beneficiado de estas contribuciones.

A través del evangelismo y las misiones, Dios ha usado a los bautistas para ayudar a que las vidas de millones de personas sean transformadas al llegar a una fe salvífica en el Señor Jesucristo.

Los bautistas ministran al sufrimiento humano en una multitud de contextos—físico, mental, emocional, social y espiritual. Hospitales y clínicas bautistas, organizaciones de cuidado para niños y ancianos, centros de acopio en los desastres naturales, centros de consejería y muchas otras entidades vendan las heridas de cuerpo y espíritu, restauran vidas desechas y contribuyen al bienestar integral de gente de toda edad, raza y condiciones.

Los bautistas encarnan el evangelio de Cristo de varias formas para atacar los males de la sociedad, tales como la pobreza, el racismo, la injusticia, la delincuencia, el hambre, la corrupción, el abuso de mujeres y niños, la drogadicción y la perversión sexual.

Los bautistas ofrecen un gran número de oportunidades educativas numerosas a una multitud de personas. Al proveer cantidades vastas de libros, periódicos y recursos digitales, los bautistas facilitan el aprendizaje de muchos. Además los bautistas hacen accesibles estudios académicos formales por medio de fomentar la obra de escuelas, universidades, y seminarios.

Quizás la contribución bautista más distintiva ha sido la de la libertad religiosa y su corolario—la separación de Iglesia y Estado. Los historiadores, tanto seculares como religiosos, reconocen a los bautistas como líderes en la lucha por la libertad de religión, una lucha que sigue.

¿Por qué funcionan los bautistas en la manera en que funcionan?

¿Por qué han crecido los bautistas desde una puñado de gente, acosados y perseguidos por organizaciones religiosas y gobiernos hasta llegar a ser una de las denominaciones más grandes del mundo? ¿Por qué han sacrificado los bautistas la comodidad, las posesiones y hasta la vida misma para ministrar a otros y trabajar por la libertad religiosa de todos?

Aunque no existe una respuesta sencilla a estas preguntas, el por qué de la acción bautista está enraizada en las creencias fundamentales bautistas. Los bautistas son una gente de diversidad vasta. Sin embargo, ellos sostienen en común ciertas doctrinas y prácticas básicas.

No hay una sola doctrina o forma de gobierno eclesial que defina a los bautistas, pero en conjunto constituyen una denominación distintiva. Algunas de estas convicciones, como la creencia en Dios, son sostenidas por todo cristiano. Otras como la creencia en el gobierno congregacional se comparten con algunas otras denominaciones. No obstante las creencias, la forma de gobierno, y las prácticas sostenidas por los bautistas se combinan de modo que sean un compañerismo único de cristianos.

Las doctrinas fundamentales incluyen las siguientes: El señorío de Jesucristo, la Biblia como la única autoridad escrita para la fe y la práctica, la competencia del alma, la salvación solo por una respuesta voluntaria de arrepentimiento y fe a la gracia de Dios manifestada en el regalo de su Hijo, el sacerdocio de todo creyente, el bautismo de solo creyentes y solo por la inmersión, y una membresía voluntaria de miembros nacidos de nuevo.

El gobierno bautista fundamental incluye los siguientes elementos: el gobierno congregacional eclesial, la autonomía de las iglesias bautistas y otras entidades bautistas, dos ordenanzas para las iglesias (el bautismo y la Santa Cena), dos oficios en la iglesia (pastor y diácono), el sostén financiero por medio de la contribución voluntaria de diezmos y ofrendas (no de los impuestos), y estilos de adoración seleccionados con libertad bajo el señorío de Cristo.

Las prácticas y los énfasis básicos bautistas incluyen los siguientes: El evangelismo, las misiones, el ministerio, la aplicación del evangelio a toda dimensión de la vida, y la educación cristiana.

El compromiso bautista a la libertad de religión subyace todas estas doctrinas, formas de gobierno y prácticas. El voluntarismo, nunca la coacción, permea todas estas convicciones. Así que los bautistas contienden por una iglesia libre en un estado libre.

Conclusión

La historia bautista es vívida y emocionante, repleta de victorias y derrotas, sacrificio y éxito, armonía y desacuerdos. Los bautistas difieren de muchas maneras, pero por lo general concuerdan en creencias y prácticas fundamentales. Mientras que los bautistas permanecen fieles a estas convicciones centrales, no solo perdurarán sino también prosperarán.

“De veras vale la pena contar la historia de los bautistas.”
Kenneth Scott Latourette
Ex profesor de Misiones y Cristianismo Mundial,
Universidad de Yale